19 mar 2009

Simple.
Era el despertar del instinto que por pereza venía dormido hacía varios meses. No era sueño, ni siquiera tristeza. Todo estaba teñido por la vasta enfermedad del acostumbramiento.
Los recuerdos quedaban cesantes en algún rincón del cuerpo, escondidos entre los surcos de piel gastada.
Las mismas palabras, en un viaje eterno y circular. Trazaban espirales agotadores, portadoras de insomnio.
Un retorno estéril y apesadumbrado. Como si el vocabulario fuese una minúscula ciudad sin puertas, sin sombras.
Un juego controlado, predestinación, que se perdía en el camino, por vislumbrar voces que incendiaban la falta de cordura.
¿Cuándo se callarán las voces?, ¿cuándo dictarán el final ficticio de un principio incierto?

16 mar 2009

CANCIONES PARA ACORDARME DE VOS

Por arte de magia las canciones se re-inventan, uno vuelve a escuchar algo después de mucho tiempo, y quizá, encuentra algo que antes no había escuchado.
Puede ser falta de atención, o la existencia de un “otro” que le dé vigencia, existencia.
También, resucitan, si el tiempo lleva lejos una melodía, que por error, falla u omisión la volvemos a escuchar, recordamos a ese “otro” que por desgracia o fortuna está lejos.
Podría ampliar el tema, pero mi enrosque “literal” atenta a la ruina fortuita de estas letras.

10 mar 2009

VOLVER

Volver, sin la mente marchita. Vale la aclaración, simplemente volver.
Hay anécdotas por contar y sed de escritura.
Así que, aquí estamos ustedes (mis no lectores) y yo.
Estoy nerviosa, como en un inmenso auditorio. Ustedes no ven toda la gente que está ahí, yo tampoco. No viene al caso.

Hipótesis Número 1: No te banco.
Hipótesis Número 2: La hipótesis Número 1 es cierta

Método Lógico Inductivo

Lo anterior puede no tener explicación, si la tiene me la reservo.

La descuartizadora de la costa

La “familia X” estaba de vacaciones en la costa. Mientras el padre se calzaba un par se zapatillas en una famosa cadena, la esposa y el hijo aconsejaba. La más pequeña de la familia aprovechaba para dar un recorrido a las instalaciones.
De repente, de un costado aparece un extenso brazo.
La niña grita: “ESCÓNDELO!!!!”
El Padre se niega, y le dice que se entregue.
El maniquí danzante en la vidriera era evidencia suficiente.