Fobia

No. Simplemente no me interesa mandar el mail que mantendrá alejada a no sé qué dama/fantasma de mi vida.


Ni me interesa dejar de tener mala suerte en el amor, o poner el nombre de mi amor o del amor del vecino del tío de ahijado de la prima de alguién.

Tampoco me interesa si San Esrapidito se ofende si le corto la cadena de mails. O si una vieja le reveló el apocalipsis a tres tanitos hace no sé cuantos años.

Seguido de eso puedo agregar que gracias a tanto power point debo tener al menos seis clases de cáncer y probabilidad de ceguera.

Y de tanta pelotudez los enfermos de cáncer están medicados con antidepresivos que no regalan en los hospitales públicos, pero que a algún infeliz se le ocurrió decir que sí.

Y antes de adoptar a un nene de Haití me agarro un chaqueñito, o mejor, más cerca me agarro a cualquier crío tirado al costado de cualquier puente de la ciudad, claro, si no lo ahogó la inundación porteña.

Aún menos me interesa ser fan de un programa pedorro de los ´90 (aunque lo haya visto), y menos aún ser fan de ningún programa con tres pelotudos en bolas que no saben hablar, y no…no les perdono todo por estar fuertes.

Ni consultar las forras, digo, las frases de Arjona, ni de ningún ser parecido. Porque para consultar música prefiero poner un disco.

Perdón la agresividad señor lector, pero luego de un reposado fin de semana, abrir los mails y sentir la casilla tan burlada me dio un poco de fobia.


Mientras escribía esto la guitarra de Noche de Perros aullaba al compás. click